Bendición de la Luz e Imposición de la Cruz Tau en el Colegio San Luis Rey
El pasado 22 de mayo, el Colegio San Luis Rey celebró un significativo acto religioso en preparación para el Sacramento de la Primera Comunión de sus estudiantes. La bendición de la luz y la imposición de la Cruz Tau, presididas por el Fray Leonardo Musse C., director de pastoral, marcaron un momento especial de reflexión y espiritualidad para los niños que se están preparando para recibir este importante sacramento.
La ceremonia comenzó con la bendición de la luz, simbolizando la guía y la presencia divina en el camino espiritual de los estudiantes. Este ritual, lleno de simbolismo y fe, permitió a los niños y a sus familias conectarse profundamente con los valores católicos y franciscanos que el colegio promueve.
A continuación, se llevó a cabo la imposición de la Cruz Tau, un símbolo significativo en la tradición franciscana que representa la humildad, la devoción y la protección divina. Fray Leonardo Musse C. explicó a los presentes el significado de este símbolo y su importancia en la vida de San Francisco de Asís, inspirando a los niños a vivir conforme a estos valores.
Este acto no solo preparó a los niños para recibir su Primera Comunión, sino que también les brindó una oportunidad para vivenciar y fortalecer su fe. La ceremonia sirvió como un recordatorio de los valores espirituales y morales que son fundamentales en la educación impartida por el Colegio San Luis Rey.
La comunidad educativa expresó su gratitud a Fray Leonardo Musse C. por su dedicación y guía espiritual, destacando la importancia de estos momentos para el crecimiento personal y religioso de los estudiantes. La bendición de la luz y la imposición de la Cruz Tau reafirmaron el compromiso del colegio con la formación integral de sus alumnos, integrando la educación académica con la vivencia de los valores católicos franciscanos.
Este evento memorable será recordado como una etapa crucial en el camino de fe de los estudiantes, preparándolos para recibir el Sacramento de la Primera Comunión con un corazón lleno de devoción y alegría.